Una Navidad más limpia y saludable
En la época navideña la población realiza más compras y consumos, lo cual genera mayor cantidad de residuos (se pueden reutilizar o reciclar) y desechos sólidos en hogares y comercios. El incremento desproporcionado de la basura afecta el ambiente y pone en grave riesgo nuestra salud.
Como parte de su campaña de RSE “Cuadra limpia y saludable”, Fundación Tierra Viva y Botiquería difunden a partir de hoy consejos a través de sus redes sociales para ayudar a las comunidades a minimizar el impacto negativo del aumento de basura en esta temporada.
Según María del Carmen Polanco, presidenta de la Asociación para la Defensa del Ambiente y de la Naturaleza (ADAN), “se estima, de acuerdo con diversos estudios de caracterización, que el incremento está entre 25 y 30%. Gran cantidad de empaques, papeles, botellas y envoltorios son parte de ese incremento”.
El relleno sanitario La Bonanza procesa cuatro millones de kilogramos diarios de desechos provenientes de los cinco municipios del área metropolitana de Caracas y de Los Valles del Tuy. Si tomamos como referencia el porcentaje máximo de incremento que estima ADAN, obtenemos que en diciembre se podrían procesar, aproximadamente, un millón 200 mil kilogramos adicionales de basura diariamente, es decir, 1.200 toneladas.
El pediatra y epidemiólogo Alejandro Rísquez afirma que el ambiente es uno de los aspectos más determinantes del estado de salud. Los riesgos de la basura se pueden clasificar en tres áreas según el tipo de residuo: “Los peligros pueden ser biológicos, químicos y físicos, y mixtos”.
Los peligros biológicos están relacionados con la materia orgánica (desperdicios de comida como las hojas de hallaca, por ejemplo), la cual requiere cuidados muy especiales porque si no está bien guardada atrae insectos y roedores (vectores). Estos desperdicios se pueden convertir en nidos de infección. Pueden causar diarrea, hepatitis, salmonelosis, tétanos, además de enfermedades transmitidas por vectores: amibiasis, dengue, fiebre chikungunya, leptospirosis y tifus, entre otras.
Uno de los contaminantes químicos que usamos frecuentemente son las pilas, las cuales pueden afectar los suelos y generar lesiones en la piel, dermatitis y hasta intoxicaciones. Entre los contaminantes físicos encontramos vidrios, inyectadoras, agujas y otros objetos cortantes, capaces de producir heridas y traumatismos al ser desechados inadecuadamente. Además, al estar mal depositados, otros elementos como cauchos, latas, muebles y chatarra se convierten en colectores de agua y criaderos de insectos y roedores.
Los fuegos artificiales también ocupan la lista de riesgos para la salud y el ambiente en diciembre. Además de que causan quemaduras en niños y adultos, pueden originar incendios en los lugares de almacenamiento y afectar nuestra vegetación.
Un comportamiento negativo que no se debe dejar de considerar en cuanto al manejo de los residuos y desechos sólidos es la incineración de la basura. ADAN advierte que sus efectos colaterales pueden ser muy dañinos. Los gases y cenizas que se producen al quemarla liberan al ambiente contaminantes sumamente tóxicos, como dioxinas, metales pesados (plomo, cadmio y mercurio), gases de efecto invernadero (responsables en gran parte del cambio climático), gases ácidos y partículas ultra finas, que son de alta peligrosidad para la salud.
La población puede obtener más información a través de las cuentas en Twitter: @TierraVivaVzla y @Botiqueria, y sumarse a la iniciativa con ideas y consultas usando la etiqueta #UnaNavidadMásLimpia. También pueden hacer sus preguntas y sugerencias sobre gestión integral de residuos y desechos sólidos en el portal www.botiqueria.com, sección “Rescata tu cuadra”, donde los especialistas de Fundación Tierra Viva aclararán sus dudas.
La campaña “Cuadra limpia y saludable” recomienda:
- Usar bolsas reutilizables al hacer sus compras. Cuando vaya a comprar la ropa para el estreno de los niños, los juguetes y los regalos, lleve bolsas reutilizables o un bolso mediano de viaje, así disminuye la cantidad de bolsas de plástico que se descartan en la temporada, las cuales son muy contaminantes y representan un grave peligro para la fauna marina. También emplee la bolsa reutilizable al ir al mercado por los ingredientes para las hallacas.
- Organizar los desperdicios para reciclarlos. La mayoría de los desperdicios son reciclables: aluminio, papel, plástico, vidrio. Organice un pequeño centro en su casa, edificio o comunidad para acopiar los envases de vidrio y de plástico de las bebidas más consumidas en Navidad para luego llevarlos a centros o jornadas de reciclaje en su municipio. También lo puede hacer con las cajas y cartones, tomando la previsión de dejarlos en un lugar seco.
- Sacar la basura a la hora. En Navidad las alcaldías deben recoger más basura y la movilización de los vehículos es más compleja por las colas. Por tanto es muy importante, para que su comunidad esté limpia, estar atento a los horarios de recolección y preguntar si serán modificados en el período navideño. Eso evita que las bolsas queden a la intemperie y puedan ser rotas por animales o personas que hurgan en ellas. También se ayuda a evitar la práctica dañina de incinerar basura.
- Donar ropa y juguetes usados. Si hace una “limpieza de clóset” en diciembre y tiene ropa usada pero en buen estado, puede fomentar su reutilización donándola a organizaciones no gubernamentales, casas de cuidado de niños y ancianos, iglesias o simplemente a personas de sectores de muy bajos recursos. Los juguetes usados también pueden ser reutilizados. Se compartirán datos de algunas asociaciones que reciben este tipo de donaciones en Twitter.
- Decir “no” a los fuegos artificiales. En Venezuela la temporada navideña coincide con el inicio de la época de sequía y por ello los fuegos artificiales pueden causar incendios de vegetación en nuestras áreas naturales. Esto es especialmente importante en el caso de los “globos del deseo”, que vuelan con una llama que puede generar incendios en nuestros parques nacionales. Además la pólvora y otros componentes de los fuegos artificiales son tóxicos para la salud.
- Desenchufar las luces del arbolito al irse a dormir. En esta época nos gusta adornar con muchas luces los árboles de Navidad, pesebres y exteriores de las casas. Aunque podemos mantener esa costumbre, es recomendable hacer algunos cambios para no desperdiciar la energía eléctrica. Encienda las luces del árbol y de los adornos solo mientras la familia esté despierta en casa. Cuando desenchufe las luces de Navidad, haga lo mismo con aparatos eléctricos que no usará en las próximas 8 horas.