domingo, 28 de junio de 2009
PROTECCIÓN INTRAHOSPITALARIA A H1N1 ISLAS CANARIAS
Mi querida amiga la Dra. Fannny Cuervo, médico pediatra quien ejerce un Servicio de Urgencias Pediatricas llamado "Jaimes CHAVES Hernandez" delas Islas Canarias, comparte con nosotros la indumentaria de protección para la atención de los pacientes sospechosos de la Nueva gripe.
Gracias Fanny y mucha suerte en tu trabajo, te la mereces....
sábado, 27 de junio de 2009
SIDA-MASCARA ¿QUÉ TAL?
jueves, 25 de junio de 2009
Niños son potenciales transmisores de AH1N1
El Nacionalwww.el-nacional.com
JAVIER GRATEROL GARCIA - 16/06/2009 20:54:24)
Los expertos recomiendan que los escolares no asistan a clases cuando presenten cualquier síntoma respiratorio o fiebre
Más de 10 menores de 18 años de edad se han contagiado en Venezuela con el virus de la gripe AH1N1; los casos positivos en escolares han originado suspensión de actividades en colegios y aislamiento preventivo de compañeros de clase por temor a que la enfermedad se propague. Incluso, muchos padres se abstienen de enviar a sus hijos a la escuela por miedo a que se puedan contagiar.
Hay una explicación para ese temor. Los especialistas en pediatría y epidemiología aseguran que los pequeños pueden extender la presencia de la gripe y permitir una más amplia circulación del virus.
"Los niños tienen la condición de poder perpetuar la enfermedad, por lo que se convierten en un factor potencial de contagio. Mientras en los adultos se calcula que puede tardar entre 7 y 8 días para desaparecer, en los niños ese proceso se puede prolongar a 10 o 21 días", explicó el pediatra y epidemiólogo Luis Echezuría.
El tiempo que permanece la influenza en el organismo, indicó, aumenta las posibilidades de transmisión. Por lo tanto, en la medida en que se mantengan la tos y los estornudos, las otras personas son más susceptibles de contagiarse. Sin embargo, aunque los síntomas duren más, no es necesario prorrogar el tratamiento por más de cinco o siete días.
Aunque aún no está completamente claro por qué ese tipo de influenza permanece más tiempo en el cuerpo de los más pequeños, los especialistas manejan la hipótesis de que los anticuerpos tardan más en la batalla por expulsar el virus porque es hasta alrededor de los nueve años cuando el sistema inmunológico se desarrolla completamente.
"Las defensas del adulto están más formadas; el sistema inmunológico es mucho más resistente y el individuo ha estado expuesto previamente a otros procesos virales, lo que le hace responder de mejor manera", subrayó el pediatra y epidemiólogo de la Universidad Central de Venezuela, Alejandro Rísquez.
Las escuelas y los preescolares se pueden convertir en un hervidero de contagios. Las prácticas sociales de los niños son distintas a las de los adultos y promueven la transmisión del virus. Los juegos, los besos, abrazos y contactos constantes potencian la transmisión. "Sus prácticas sociales son más difíciles de controlar. Comparten el espacio vital de cada persona de una manera más estrecha a como lo hacemos los adultos, todo se lo llevan a la boca, las normas de higiene son mucho menores y, por lo tanto, aumenta la posibilidad de que la enfermedad se transmita entre ellos", señaló.
Por eso, recomiendan no enviar a los niños a la escuela cuando presenten fiebre, malestar general, dolor de cabeza, dolor de garganta o alguna dificultad respiratoria.
"En la medida en que se contagien más niños, el virus se mantendrá por más tiempo y aumentan las posibilidades de que se enfermen más personas", destacó Echezuría.
¿Más susceptibles? La mayoría de los casos positivos de gripe AH1N1 hasta el momento se ha detectado en individuos con edades entre los 15 y los 45 años.
Aunque los especialistas no descartan que los menores de 2 años sean susceptibles y requieran más cuidados, aseguran que no son ellos los más afectados.
Indican que a partir de esa edad el sistema inmune comienza a tener semejanzas con el de los adultos, por lo que las probabilidades de contagio y los síntomas también se hacen similares.
JAVIER GRATEROL GARCIA - 16/06/2009 20:54:24)
Los expertos recomiendan que los escolares no asistan a clases cuando presenten cualquier síntoma respiratorio o fiebre
Más de 10 menores de 18 años de edad se han contagiado en Venezuela con el virus de la gripe AH1N1; los casos positivos en escolares han originado suspensión de actividades en colegios y aislamiento preventivo de compañeros de clase por temor a que la enfermedad se propague. Incluso, muchos padres se abstienen de enviar a sus hijos a la escuela por miedo a que se puedan contagiar.
Hay una explicación para ese temor. Los especialistas en pediatría y epidemiología aseguran que los pequeños pueden extender la presencia de la gripe y permitir una más amplia circulación del virus.
"Los niños tienen la condición de poder perpetuar la enfermedad, por lo que se convierten en un factor potencial de contagio. Mientras en los adultos se calcula que puede tardar entre 7 y 8 días para desaparecer, en los niños ese proceso se puede prolongar a 10 o 21 días", explicó el pediatra y epidemiólogo Luis Echezuría.
El tiempo que permanece la influenza en el organismo, indicó, aumenta las posibilidades de transmisión. Por lo tanto, en la medida en que se mantengan la tos y los estornudos, las otras personas son más susceptibles de contagiarse. Sin embargo, aunque los síntomas duren más, no es necesario prorrogar el tratamiento por más de cinco o siete días.
Aunque aún no está completamente claro por qué ese tipo de influenza permanece más tiempo en el cuerpo de los más pequeños, los especialistas manejan la hipótesis de que los anticuerpos tardan más en la batalla por expulsar el virus porque es hasta alrededor de los nueve años cuando el sistema inmunológico se desarrolla completamente.
"Las defensas del adulto están más formadas; el sistema inmunológico es mucho más resistente y el individuo ha estado expuesto previamente a otros procesos virales, lo que le hace responder de mejor manera", subrayó el pediatra y epidemiólogo de la Universidad Central de Venezuela, Alejandro Rísquez.
Las escuelas y los preescolares se pueden convertir en un hervidero de contagios. Las prácticas sociales de los niños son distintas a las de los adultos y promueven la transmisión del virus. Los juegos, los besos, abrazos y contactos constantes potencian la transmisión. "Sus prácticas sociales son más difíciles de controlar. Comparten el espacio vital de cada persona de una manera más estrecha a como lo hacemos los adultos, todo se lo llevan a la boca, las normas de higiene son mucho menores y, por lo tanto, aumenta la posibilidad de que la enfermedad se transmita entre ellos", señaló.
Por eso, recomiendan no enviar a los niños a la escuela cuando presenten fiebre, malestar general, dolor de cabeza, dolor de garganta o alguna dificultad respiratoria.
"En la medida en que se contagien más niños, el virus se mantendrá por más tiempo y aumentan las posibilidades de que se enfermen más personas", destacó Echezuría.
¿Más susceptibles? La mayoría de los casos positivos de gripe AH1N1 hasta el momento se ha detectado en individuos con edades entre los 15 y los 45 años.
Aunque los especialistas no descartan que los menores de 2 años sean susceptibles y requieran más cuidados, aseguran que no son ellos los más afectados.
Indican que a partir de esa edad el sistema inmune comienza a tener semejanzas con el de los adultos, por lo que las probabilidades de contagio y los síntomas también se hacen similares.
jueves, 4 de junio de 2009
VACUNAS EN EL SIGLO XXI El futuro de las vacunas
En el campo de desarrollo de vacunas probablemente van a florecer ciertas
tendencias en el futuro a continuación 10 predicciones:
• Aumentará el desarrollo de vacunas combinadas que contengan valencias
múltiples. La valencia es el número de antígenos diferentes en una vacuna: por
ejemplo, una vacuna trivalente tiene tres antígenos.
• La inmunidad puede desvanecerse más adelante durante la infancia sino
readministran nuevas dosis de refuerzo.
• Todos requieren vacunación antes de la adolescencia. Por lo tanto, la edad de
11 a 12 años será la etapa en que se administren muchas vacunas.
• Los adultos sufren el envejecimiento natural del sistema inmunológico, aquí
vemos los defectos que vienen con la edad y la corrección de estos defectos
debería mejorar la eficacia de las vacunas.
• Se han difundido ampliamente dos estrategias nuevas para el desarrollo de
vacunas experimentales, la inyección en seres humanos de segmentos de ADN
y la inserción de genes de patógenos en microorganismos inocuos.
• Las inyecciones intramusculares o subcutáneas han servido bien como medio
para incorporar vacunas. Sin embargo, hay limitaciones a la factibilidad de
numerosas inyecciones y razones teóricas para preferir otras rutas de inmunización.
Más aún es prometedora la inmunización transcutánea usando parches, microagujas
y otras tecnologías ingeniosas para pasar las vacunas a través de la piel.
• La malaria, la tuberculosis y el VIH son los blancos principales del desarrollo
de vacunas, ya se ha logrado la protección a corto plazo contra la malaria.
• Las posibilidades de una vacuna que proteja contra la tuberculosis en los adultos.
La inserción de genes con código para proteínas adicionales debería mejorar la
vacua base Bacillus Calmettte-Guérin.
• El VIH ha resultado ser un blanco difícil para la vacunación, pero es probable
que las pruebas clínicas actuales produzcan una vacuna que reduzca la gravedad
de infección y prolongue la vida.
• La influenza sigue siendo una infección banal pero mortífera. Aunque las vacunas
que tenemos son muy beneficiosas, la mejor protección se derivará de la inclusión
de más proteínas de influenza.
realizado por Dr. Stanley A. Plotkin, asesor ejecutivo y director general de Sanofi
Pasteur. www.infectologia.org
martes, 2 de junio de 2009
10 datos sobre la epidemia de tabaquismo y el control mundial del tabaco
7 de febrero de 2008 OMS
El tabaco mata hasta la mitad de los fumadores. Sin embargo, se consume habitualmente en todo el mundo debido a que se vende a bajo precio, se comercializa de forma agresiva, no se toma conciencia sobre los peligros que entraña y las políticas públicas contra su consumo son incoherentes.
La mayoría de los peligros del tabaco no se evidencian en la salud del fumador hasta años o incluso décadas después de iniciarse el consumo. Es por ello que, mientras éste aumenta en todo el mundo, la epidemia de enfermedades y muertes conexas aún no ha alcanzado su punto álgido.
Los datos que se presentan a continuación muestran cómo progresa la epidemia devastadora del tabaquismo, describen la situación del control del tabaco a escala mundial, y explican la manera de frenar esta epidemia prevenible con un conjunto de seis políticas eficaces de control.
Tabaquismo
Se denominan productos del tabaco los que están hechos total o parcialmente con tabaco, sean para fumar, chupar, masticar o esnifar. Todos contienen nicotina, un ingrediente psicoactivo muy adictivo.
El consumo de tabaco es uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades crónicas, como el cáncer y las enfermedades pulmonares y cardiovasculares. A pesar de ello, su consumo está muy extendido en todo el mundo. Varios países disponen de leyes que restringen la publicidad del tabaco, regulan quién puede comprar y consumir productos del tabaco, y dónde se puede fumar.
El tabaco mata hasta la mitad de los fumadores. Sin embargo, se consume habitualmente en todo el mundo debido a que se vende a bajo precio, se comercializa de forma agresiva, no se toma conciencia sobre los peligros que entraña y las políticas públicas contra su consumo son incoherentes.
La mayoría de los peligros del tabaco no se evidencian en la salud del fumador hasta años o incluso décadas después de iniciarse el consumo. Es por ello que, mientras éste aumenta en todo el mundo, la epidemia de enfermedades y muertes conexas aún no ha alcanzado su punto álgido.
Los datos que se presentan a continuación muestran cómo progresa la epidemia devastadora del tabaquismo, describen la situación del control del tabaco a escala mundial, y explican la manera de frenar esta epidemia prevenible con un conjunto de seis políticas eficaces de control.
Tabaquismo
Se denominan productos del tabaco los que están hechos total o parcialmente con tabaco, sean para fumar, chupar, masticar o esnifar. Todos contienen nicotina, un ingrediente psicoactivo muy adictivo.
El consumo de tabaco es uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades crónicas, como el cáncer y las enfermedades pulmonares y cardiovasculares. A pesar de ello, su consumo está muy extendido en todo el mundo. Varios países disponen de leyes que restringen la publicidad del tabaco, regulan quién puede comprar y consumir productos del tabaco, y dónde se puede fumar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)