lunes, 11 de septiembre de 2017

La consulta del adolescente suele enfocarse en prevención más que en curación

La consulta del adolescente suele enfocarse en prevención más que en curación 30 de agosto de 2017 05:45 AM PARA COMPARTIR
Aunque sean grandes deben ir al médico Médicamente, los adolescentes representan el grupo de 10 a 18 años, con baja incidencia de morbilidad, es decir, se enferman poco. ¿Tienes algo que decir? Inicia la conversación y sé el primero en comentar. Los motivos de consulta se orientan a la esfera de crecimiento y desarrollo puberal, aunado a la dimensión psicológica, que comprende rendimiento académico, déficit de atención, imagen corporal, trastornos alimenticios, orientación sexual y consumo de drogas. Cuando analizamos la casuística en un servicio de emergencia hospitalaria, los adolescentes acuden por estar involucrados en accidentes automovilísticos o deportes y, muy pocas veces, por agudización de una patología medica Los servicios médicos dedicados a la consulta del paciente adolescente están aún en desarrollo. Apenas, a finales de la década de los 70, surgió la necesidad de considerar un espacio ad hoc para la atención de este grupo. En Venezuela ha sido pionero el hospital de Niños J.M. de Los Ríos, que fundó su servicio en 1985, al mando de la doctora Enriqueta Sileo. La consulta del adolescente se ha planificado como consultas preventivas en diferentes áreas de salud en este grupo etario. Los pacientes acuden para evaluación integral, monitorear el progreso de maduración puberal o alertar sobre conductas de riesgo. Sigue siendo un problema la alta incidencia de embarazo en adolescentes. En Venezuela, para 2016, se registró la más alta tasa en Suramérica, con 101 nacimientos por cada mil mujeres de 15 a 19 años, cifra obtenida por el diagnóstico mundial del Fondo de Población de las Naciones Unidas. Por otro lado, uno de cada siete adolescentes venezolanos presenta déficit de atención que se manifiesta en las primeras etapas de esa edad con bajo rendimiento académico y fracaso escolar. En adolescentes mayores puede ser causa de conductas de riesgo como consumo de drogas y alcohol. En 2015, Unicef publicó que el Sida era la primera causa de muerte en adolescentes de África y la segunda mundial con 26 nuevas infecciones cada hora. En ese grupo, la mortalidad en VIH no ha descendido, pese a los esfuerzos. El cáncer aparece pero es poco frecuente La patología tumoral más frecuente en pacientes adolescentes, se orienta en la esfera hematológica, principalmente leucemias y linfomas, así como tumores de tejidos sólidos como huesos y testículos, que avanzan de forma agresiva.. La incidencia de cáncer en la población adolescente es de 200 casos por millón al año. Aunque el cáncer adolescente representa apenas uno por ciento del total, es la segunda causa de mortalidad en estas edades. Algunos factores pueden predisponer a la presencia de estos tumores en la adolescencia, como las infecciones, las hormonas, el proceso de crecimiento y la exposición a elementos contaminantes. El osteosarcoma es el cáncer óseo más frecuente en la juventud. Es más común en los extremos de los huesos largos, como la tibia, el fémur y el húmero proximal. Los síntomas que más aparecen son fracturas, dolores e inflamación local, y cierta incapacidad funcional. El tumor puede diseminarse a pulmones u otros huesos. El tratamiento suele incluir quimioterapia y cirugía. La leucemia, o cáncer de la sangre, es uno de los tipos de cáncer más frecuente en la población infantil y adolescente, provoca diversos problemas, como hemorragias, anemia, dolor óseo e infecciones. Puede diseminarse a los ganglios linfáticos, hígado, bazo, cerebro y testículos. Cuando aparece durante la adolescencia, los tipos de leucemia más frecuentes son la linfocítica aguda y la mieloide aguda. El tratamiento para esta enfermedad oncológica incluye quimioterapia y, a veces, también radioterapia. Los trasplantes de médula ósea son otra opción terapéutica. Las probabilidades de curación son altas en ciertos tipos de leucemia, sin presentar posteriores recaídas.